¿Por qué respetamos a otros humanos al menos en el sentido de no esclavizarlos?¿Es porque existen leyes que nos castigarían? Creo que al menos en muchos casos no abusaríamos de otros humanos aunque no estuviese establecido en las leyes por parte de un estado. Es verdad que aún existen abusos, explotación e incluso esclavitud en algunos lugares, pero en general mucha gente rechaza la idea de esclavizar a otros humanos. También es verdad que sigue habiendo necesidad de educar en ese sentido, por ello aún es una tarea pendiente la concienciación acerca de los derechos morales incluso humanos, aún y que existan leyes estatales y tratados promulgados internacionalmente al respecto.
Los sujetos tenemos derechos morales, son intrínsecos por el hecho de tener intereses, y de esto se deriva que tenemos valor intrínseco por ser personas, es un valor que nos otorgamos a nosotros mismos independientemente de valoraciones externas.
¿Qué es un derecho? Es una protección de intereses de los sujetos, y existen sólo porque existen sujetos, y todo derecho va en relación a proteger lo que le afecta a dichos sujetos. Las cosas no tienen derechos, sino que su valor es instrumental, extrínseco, es decir, depende del valor que el o los sujetos que utilizan dicha cosa u objeto le otorguen.
Si alguien daña un objeto que tiene valor instrumental para un sujeto, se considera incorrecto porque ese objeto le sirve para sus fines a un sujeto. Por ejemplo, un dentista usa herramientas de trabajo con las que realiza sus labores para atender pacientes, y si alguien daña dichas herramientas de trabajo, esa acción no es incorrecta porque las herramientas de trabajo tengan un valor en sí mismo, sino porque tiene un valor instrumental para un sujeto, en este caso el dentista que necesita dichos instrumentos para realizar su trabajo. En ese caso, los instrumentos de trabajo no son quienes portan derechos de ningún tipo, sino solo el sujeto que hace valoraciones acerca de su propia vida y de las cosas que lo rodean, entre ellas los instrumentos de trabajo.
El valor de las cosas no es inalienable, podemos asignar valores arbitrarios a dichas cosas según nuestra conveniencia. Hoy podría uno decidir que un trozo de madera sirve para equilibrar una silla, mañana para detener una puerta o luego tallarla para hacer alguna figura decorativa o destruirla de manera que no afectemos a terceros.
Por el contrario, el valor de los sujetos sí es inalienable, no es ético vulnerar los intereses de los sujetos debido a que eso se considere benéfico para otros sujetos. El derecho moral a la vida, a la libertad, a la conservación de la integridad corporal, a tener un espacio donde desenvolverse libremente, a ejercer su voluntad para los asuntos concernientes para consigo mismo, por mencionar algunos; son derechos inalienables, es decir, otros sujetos no tienen moralmente derecho a coartarlos, a pasar por encima de ellos por beneficiarse de vulnerar dichos intereses.
Estos derechos son independientes de lo que esté escrito en constitución alguna de cualquier gobierno o estado e incluso de lo que piense la gente, sino que son de carácter moral. En relación a la ética, existe la obligación de respetar dichos derechos, de lo contrario se cae en actos antiéticos.
La ética a que me refiero es la ética racional, es decir, aquella derivada de ejercer un razonamiento lógico y en base a evidencias contrastables, no a lo que suele creerse que es cuestión de cada cual, conocido como relativismo moral o cultural. La ética es de carácter universal, no depende de juicios arbitrarios, sino de contrastarse con la razón tomando en cuenta los hechos de forma objetiva y que estos sean contrastables.
Entonces los derechos morales son algo que intrínsecamente tiene un sujeto, su existencia no depende de la aprobación de terceros, pero necesitan ser reconocidos y respetados por otros sujetos para que no se vean vulnerados. ¿Qué se necesita para que otros sujetos reconozcan y respeten dichos derechos morales?: Educación.
Los derechos morales pueden reconocerse también como Derechos Animales, ya que se refieren a los intereses fundamentales. El respeto hacia ellos se fundamenta en el principio de igualdad, donde a intereses similares o iguales, se debe considerar el mismo respeto.
La educación es primordial, entendiéndose educación como la exposición de argumento lógicos y evidencias comprobables, no como dogmatismo. Esta educación se necesita cultivar desde la infancia en el desarrollo de la empatía para ir desarrollando en los agentes morales el razonamiento moral suficiente para controlar sus impulsos morales, para responder por sus actos respecto a la ética, porque están en pleno uso de su capacidad de entender la ética y actuar correspondiendo a ella. Los agentes morales hasta donde sabemos son humanos adultos en plenitud de sus facultades mentales y la capacidad de empatizar. Son estos quienes tienen la obligación moral de respetar los derechos morales de los demás sujetos.
Si podemos reconocer algún tipo de obligación absoluta que tenemos los agentes morales, es precisamente no vulnerar los derechos de otras personas, humanas o no humanas. Sucede que en el caso de la explotación animal, existe el sesgo del no reconocimiento del valor inherente de los demás animales, la creencia de que existen para fines humanos, un dogma. La manera de contrarrestar dicho dogma es a través de la educación, a través del activismo educacional en el veganismo y los Derechos Animales.
Esta educación es un medio ético y tiene como finalidad correspondiente que el sujeto agente moral asuma dicha información y actúe en consecuencia rechazando participar en la explotación animal y promoviendo a su vez el veganismo y los Derechos Animales en otros sujetos.
¿En qué deriva a mediano y largo plazo esta acción educativa? En que vaya permeando en la sociedad el respeto por el valor inherente de las personas no humanas, teniendo al veganismo como base, y así ir convirtiendo a este en una norma social, en que haya un cambio de paradigma.
La abolición de la explotación animal no llegará por leyes o acuerdos (así estos sean legítimos moralmente y no promulgados desde figuras o grupos que concentren el poder) impuestos a la sociedad, sino que más allá de su legitimidad moral, estará fundamentado en un cambio de paradigma que hará que la sociedad misma se organice para la labor educativa constante e incluso aplicar sanciones éticas a los pocos agentes morales que se nieguen a respetar a los demás animales (y a los sujetos en general). Dado que el veganismo no puede ser impuesto, sino asumido, sino sólo se puede imponer no explotar animales; el sostenimiento en el tiempo de la observancia de acuerdos sociales relacionados a la no explotación, sólo puede ser posible si la mayoría ha asumido el veganismo como base moral para la defensa de los Derechos Animales.
Este nuevo paradigma o norma social, es lo que haría que alguien independientemente de que no existan leyes establecidas desde una autoridad, respete a otro sujeto, en este caso las personas no humanas. Esto no significa que no pueda haber acuerdos sociales entre iguales agentes morales en delante donde quede de manifiesto (en asambleas de carácter horizontal e incluyente sin intervención estatal, por ejemplo) que dado que no es correcto usar animales, se pueden acordar ciertas acciones para relacionarnos como sociedad de una manera justa con los demás animales, por ejemplo acordando acciones conjuntas para adecuar espacios de convivencia con ellos, qué ayuda se les brindaría de ser necesario, etc; pero dichos acuerdos sociales se dan posterior a que ya es o esta por ser una norma social el asumir que las personas de otras especies tienen derechos morales, y que por lo tanto no deben ser explotadas.
Si fuese cuestión fundamental las leyes provenientes de un estado o autoridad impuesta, podrían hoy mismo hacerse leyes para prohibir la explotación animal, para que todo acto de vulneración a los Derechos Animales fuese ilegal, pero no existe la norma social que lo respalde, así que las cuestiones «legaloides» no serían ni pragmáticas siquiera, por un lado; ni éticas por otro, respecto a que usar medios opresores como grupos o figuras de concentración de poder, no es utilizar un medio ético para una causa ética, una causa que es en esencia de libertad, y las leyes impuestas desde el parlamento u otros gobernantes no son significado de libertad sino su antítesis.
Tampoco la prohibición gradual de usos de animales tiene que ver necesariamente con la asunción del veganismo, sino que puede deberse a diversos factores, entre ellos la creencia de que dichos usos es prioritario eliminarlos porque son más crueles (bienestarismo) o porque se piensa que traen malas consecuencias para los propios humanos, como por ejemplo que alguien que sea cruel con los demás animales pueda serlo con los humanos (antropocentrismo).
Pensar en que la gente deje de explotar animales por medio de leyes impuestas, es apelar al miedo, o por otra parte, es solo cuestión de tiempo para que sean derogadas por no ser una cuestión que asuma la gente. Y si la norma social en base al veganismo fuese una realidad, entonces no tendría sentido pedirle a parlamentarios hagan leyes para prohibir una cuestión que ya es asumida por gran parte de la gente de una región, la cual puede auto-organizarse para determinar qué procederá si alguien vulnera los derechos morales de un sujeto no humano y para seguir promoviendo su respeto, y dichos procedimientos sea en base a cuestiones éticas tanto hacia animales no humanos como hacia humanos.
En pocas palabras: si ya existe un cambio de paradigma a nivel social, con base en el veganismo, la gente misma velará por una relación respetuosa con los demás animales, sin necesidad de gobernantes de ningún tipo; si no existe un cambio de paradigma, ni es práctico porque no tendrá observancia una ley impuesta (justa o injusta) por grupos o figuras que concentran el poder, ni es ético porque el fin no justifica los medios, y el endosar la responsabilidad de ser éticos y de no ser cómplices de la injusticia es inmoral.
¿Existen situaciones donde sea justificado dañar la integridad física (uno de los derechos morales) de los sujetos? Solo cuando es por defensa de la vida propia ante un ataque inminente hacia nuestra salud, vida y libertad. ¿Existe justificación para ir contra el valor extrínseco de las cosas? Está justificado cuando dichas cosas son utilizadas como instrumentos de opresión, por ejemplo destruir un centro de explotación animal y las herramientas que ahí se encuentren con las cuales oprimen a sujetos; romper una puerta o cerca para rescatar personas (humanas y no humanas). Esto procurando no dañar a otros sujetos humanos y no humanos si no es por la defensa de la propia vida o de alguien indefenso. Éticamente no habría inmoralidad en dichos casos, otra cuestión es si eso aporta o dificulta dependiendo del contexto, a la educación en el respeto a las víctimas, sin embargo considero por ello que primero debemos enfocarnos en la acción educativa, para que la norma social permita que las acciones directas de rescates sean menos necesarias. La autodefensa o la defensa de seres bajo nuestra responsabilidad tampoco requieren de promulgación de leyes, sino que al haber una educación ética, debe darse por sentado que es legítima moralmente al ser una cuestión de lógica.
Así pues, considero que como siempre, la base es la educación, para que las acciones conjuntas puedan tener mayor impacto en el avance hacia un mundo justo para con los demás animales. La base es difundir sobre los derechos morales de las personas no humanas, teniendo como punto de partida el derecho moral absoluto a no ser explotados.
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